Las moléculas más conocidas y buscadas por quienes cultivan Cannabis, es el CBD, de amplias propiedades medicinales y el THC, un psicoactivo, protagonista de siglos de intensos debates sobre su legalización, que fue prohibida por primera vez en la historia, por Napoleón Bonaparte.
Lo interesante es que tanto el CBD, como el THC, jamás son sintetizados por la planta … bueno, no directamente.
Mantener bien nutrida a la planta, es necesario para formar el primer canabinoide, el ácido cannabigerólico o CBGA, formado a partir de ácido olivetólico, y pirofosfato de geranilo.
Este primer cannabinoide, es generado por todas las subespecies de cannabis, no posee actividad psicoactiva, y ya comienza a mostrar cualidades medicinales, en la reducción de la ansiedad y tensión muscular, tiene actividad analgésica e incluso es muestra utilidad para el glaucoma.
El CBGA, es la base, para formar la resina de la planta, que es secretada por las infloraciones de la hembra los Coloquialmente llamados "cogollos".
La resina es secretada como mecanismo de defensa para soportar un clima de Medio Oriente, o sea cálido y seco, y como mecanismo para capturar el polen del macho, por lo que lo ideal es que crezca en ausencia de una pareja del mismo sexo.
La resina incluye 3 moléculas principales, CBCA, CBDA y THCA, variando su concentración según la subespecie que sea. (Sativa, indica, ruderalis etc).